Mi nombre es Sara Lobla y soy fotógrafa o quizás soy fotógrafa y mi nombre es Sara Lobla. No se con exactitud que fue lo que vino primero. Lo cierto es que apenas recuerdo cuando apreté por primera vez un botón…
Seguramente habría que rebobinar demasiado. Lo que es imborrable es la idea de cómo desde aquel remoto momento, en el que empecé a coleccionar recuerdos, en el que mi familia se las ingeniaba para esconderse de mi pequeño objetivo, y en el que mis encuadres cortaban casi todos los pies de mis únicos modelos, aquella inocente inquietud por la fotografía se iba convirtiendo poquito a poco y de forma inconsciente, en lo más substancial de mi vida.
Así que mi pasión la llevo a todas las partes del mundo donde quiera cualquier pareja que retrate su amor de romance, su historia de familia, su sentir.